Uno de los muchos elementos irreverentes de la ciudad de Springfield en The Simpsons es esa central nuclear en la que trabaja Homer y que maneja con tiranía y despreocupación Mr. Burns, de tal manera que en los ríos aparecen peces de tres ojos o los trabajadores son patos. Dicha central nuclear es uno de los motores económicos de la villa que habitan los personajes amarillos.
Pues bien, según leo en Europa Press, la imagen que da The Simpsons de una central nuclear es a la que se han acostumbrado los españoles. Esto no tendría mucha trascendencia si no fuera porque ahora mismo hay un debate en el país sobre la instalación de un nuevo cementerio de residuos nucleares. En estos tiempos de crisis, algunos municipios de España han querido albergar en su localidad dicho almacén para crear nuevos puestos de trabajo.
Así, según José Luis Pérez, ex presidente de la asociación Jóvenes Nucleares:
La serie ha permitido ver que una central nuclear puede ser el motor de un pueblo, como es el caso de Springfield [...]. Me di cuenta que la gente de mi alrededor, cuando sabían que trabajaba en el sector me asociaban con Homer o algún personaje de la serie. Ha dejado cierto poso el estar veinte años viendo The Simpsons.
Por otra parte, el psicólogo Juan José Millán ha advertido de que imágenes negativas como la del pez de tres ojos o la de desastres medioambientales pueden también "condicionar" en la percepción de este tipo de "fabricantes" de energia.
Yo creo que lo que Matt Groening y los guionistas quieren hacer con la central nuclear es ridiculizar la energía nuclear, en una especie de defensa ecologista. Una burla de quienes creen en ella. ¿Vosotros qué créeis?
Vía: Europa Press | Foto: Kraken